Si nuestro organismo fuese perfecto, y nuestra ingesta de alimentos se limitara exclusivamente a la obtención de la energía gastada, no habría problemas de sobrepeso, la gente no comería en exceso y gran parte de los problemas de los problemas de salud que hay en el Norte no existirían. Pero nuestras conductas se escapan a la norma, y afortunadamente, los alimentos nos producen placer al comerlos, mediante una respuesta de refuerzo hedónico (cuyos mediadores son los mismos que en la adicción a las drogas), el cuerpo permite garantizarse un aporte decente de comida gracias a las “palmaditas en la espalda” que nos aportan la Insulina y la Leptina.
Relacionando un poquito la fisiología, y en especial los conceptos de “glucemia”, “lipemia”, “saciedad” y “apetito” se puede dar una justificación lógica a por qué se recomienda tomar 5 comidas al día.
Apetito-Saciedad
El apetito es un sistema que regula a corto plazo la ingesta de alimentos. Las señales de saciedad pueden afectar el tamaño de las comidas individuales, pero no explican siempre la aparición de un sobrepeso.
El principal determinante del tamaño de una comida es la saciedad, la cual se refiere a los procesos que promueven la terminación de la comida. La saciedad resulta de la acción coordinada de una serie de señales neurales y humorales que nacen en el tracto gastrointestinal, en respuesta a las propiedades fisicoquímicas de los alimentos ingeridos.
La aparición de hipoglucemia, entre otros factores, activa una serie de procesos fisiológicos encaminados a contrarrestar la bajada de glucosa en sangre, de esta manera aparece el hambre. Si realizamos pocas ingestas durante el día, concentrando todos los nutrientes en 2-3 veces, estamos produciendo cambios bruscos en nuestra glucemia, ya que tenemos que comer más cantidad para contrarrestar el tiempo de “ayuno”.
Es lo que nos suele ocurrir en grandes comilonas, que una gran ingesta va seguida tras mucho tiempo de ayuno, no se vuelve a tener apetito hasta pasadas muchas horas y en esa ocasión regresa más fuerte de lo que habría sido deseable.
Entre otras cosas, la ingesta de 5 comidas al día permite un mayor control de la glucemia, (de hecho es un pilar clave en el tratamiento de la diabetes) permitiendo controlar nuestro apetito y saciedad mucho mejor. Por supuesto, todo ello debe de ser contextualizado en un entorno de comida sano y sin prisas para poder saciarnos cuando corresponde.
Nuevas consideraciones
Además, se están incorporando nuevas evidencias y consideraciones a la hora de la regulación de las ingestas, ya no es sólo la glucemia y la saciedad, ahora barajamos que es de suma importancia la lipemia (concentración de lípidos en sangre).
Tener una lipemia alta supone un aumento del riesgo cardiovascular, y las personas que tienen una alta lipemia postprandrial (después de las comidas) tendrán en sangre durante las siguientes horas más grasa circulante vehiculizada por los quilomicrones y por tanto más riesgo de incorporar al endotelio arterial materia grasa (conllevando un mayor riesgo de aterosclerosis).
Pérez Jiménez ha destacado que no sólo importa en la lipemia postprandrial la cantidad de grasa ingerida, también influye el tipo de grasa, de esta manera, la grasa saturada produce curvas más prolongadas que las insaturadas, conllevando mayor riesgo cardiovascular.
Evitando grandes atracones seguramente evitaríamos ascensos pronunciados en la lipemia después de las comidas, reduciendo la exposición a este factor de riesgo cardiovascular.
Es la comida, no los alimentos.
El profesor Blundell, en las pasadas XVI Jornadas Nacionales de Nutrición práctica en su conferencia explicó y manifestó alguno de los motivos de por qué la EFSA no había aceptado la mayoría de los “Satiety Claims” de algunos alimentos que querían incluir en su etiquetado manifiestos como: “Suprime el apetito, controla el hambre, incrementa tu sensación de plenitud, satisface tu hambre“.
Entre alguno de los argumentos, se encontraban estas declaraciones como ridículas, ya que correspondían a “Poca potencia del producto y poca capacidad para controlar el apetito”. Por último, esta ponencia concluyó haciendo hincapié en que “la saciedad no depende de alimentos individuales, sino de la comida entera en sí”.
La clave para conseguir una sensación de saciedad es consumir la misma cantidad de energía en un volumen mayor, es decir, consumir alimentos con menor densidad calórica.
¿Cómo podríamos relacionar todo esto?
Probablemente mediante ingestas pequeñas y regulares (5 al día frente a las 3 que mucha gente suele realizar) podríamos exponernos a cambios menos bruscos en la glucemia y la lipemia, además de mejorar la regulación de nuestro apetito y saciedad.
Fuentes:
- Francisco J. Tébar Massó, Marta Garaulet Aza. (2003) Regulación del apetito: nuevos conceptos. Rev Esp Obes Vol. I: 13-20
- John E. Blundell (2012) Functional Foods for Satiety and body Weight. (XVI Jornadas Nacionales Nutrición Práctica. Madrid)
- Moisés Vásquez-Machado, Guido Ulate-Montero. (2010) Regulación del peso corporal y del apetito. Acta méd. costarric. Vol 52 (2), abril-junio 2010
- Pérez Jiménez F. (2012) La lipemia postprandial: una situación fisiológica de potencial riesgo para la salud. (XVI Jornadas Nacionales Nutrición Práctica. Madrid)
Bastante claro lo que quieres informar, pero el tema es que requiere una fuerza de voluntad importante ya que como bien has dicho la ingesta de comida es un proceso hedónico, como las drogas, la dopamina que se libera y viaja a nuestro núcleo accumbens, el sistema de refuerzo, hace que sintamos placer y predilección por aquellos alimentos más calóricos. Y esto realmente es complicado de combatir. Necesita de una convicción real del individuo sobre el cuidado de su salud. Y la tentación siempre está ahí.
Me ha gustado leerte. Saludos.
Me ha encantado como lo has expuesto, ha quedado muy claro y didáctico. En cuanto a lo que comenta Rafael, aunque estoy de acuerdo contigo en lo de que la comida no solo satisface una necesidad fisiológica sino que también es un placer “comer por comer”, por mi experiencia con pacientes tengo que decir que el hecho de hacer 5 comidas al día les ha ayudado mucho a controlar su apetito desmesurado, por ese control de la glucemia que se ha comentado en la entrada, así que al no pasar hambre no les ha costado tanto adaptarse a la nueva forma de comer. Los cambios de hábitos cuestan, pero si la dieta está bien calibrada y adaptada a tus gustos y preferencias te costarán las nuevas normas 1 semana como mucho, después te sentirás mejor que antes y te resultará difícil volver a tus antiguos hábitos.
Es mi opinión;)
Sin duda repartir las ingestas durante el día es una gran herramienta para los D-N, no sólo nos puede permitir saciar y bajar el apetito, bien usada, podemos aplicarla para conseguir aumentar cantidades en personas que necesitan ganar peso.
Todo depende de la densidad calórica que usemos en los platos.
No hay que complicarlo tanto. Es cierto que hacer varias comidas poco copiosas y variadas es sano y ayuda ha reducir la cantidad total de calorias que igieres y el cuerpo almacena. Es peor comer menos veces y para compensar con ansiedad. Entonces el organismo tiene una especie de “hambre” para retener y almacenar lo que comes. Esto no quita para que mover un poco el cuerpo tambien ayude. Igual que estar ocupado tambien ayuda.
El tema de la lipemia no lo tenía tan presente como el de la glucemia. Tiene toda la lógica.
Excelente información, como siempre.
Reblogged this on La Cocotte Vanille de Flora and commented:
Buen artículo presentando los conceptos importante de la glucemia y de la lipemia.
Buen post Aitor, no es fácil encontrar un artículo que explique este proceso de una forma tan clara!! Un saludo.
Aitor, ultimamente se habla mucho sobre 3 comidas o dos, atendiendo a que nuestro organismo descanse entre digestión y digestión evitando también la no saturación del pancreas entre otras cuestiones. Dicen que el ser humano desde su origen nunca tuvo posibilidad de tener 5 comidas disponibles y cuando a tenido comida se ha saciado con grandes cantidades.
En mi humilde experiencia cuando he comido muchas veces he llegado a las comidas sin hambre y he comido a desgana, mientras que cuando he comido 3 comidas he llegado con mas apetito. Dicen que esto sería lo natural y no alimentarnos como si de terneros se tratara para engordarlos a toda costa. También está el tema de que para la mayoría de la gente es muy engorroso disponer cada dos horas o tres de comida estando trabajando o haciendo alguna actividad…
¿que me puedes decir?
Saludos.
¿Que te parece este artículo sobre el tema Aitor? Te dejo el enlace.
http://www.acaloriecounter.com/diet/how-many-meals-a-day-when-how-often-should-you-eat/
Hola Rubén,
En primer lugar, un plan dietético que se denomina a sí mismo como “El mejor plan dietético del mundo” y que además empieza su argumentación atacando a otros planes… no pinta la cosa muy seria. Si te das cuenta sigue la argumentación lógica de la venta de un producto.
En primer lugar dice que no importa el número de ingestas, esto es drásticamente falso por mecanismos de regulación fisiológica que se citan en este mismo post. El estudio que cita es de 16 sujetos y para dietas con mucha restricción calórica, donde no se pueden acentuar tanto los cambios de glucemia-lipemia, porque obviamente comes mucho menos.
Desde ahí, se centra en el tema de que tienes que comer como mejor se adapte a ti (cosa en la que estoy completamente de acuerdo) pero no por ello tiene que intentar tumbar la evidencia de que que el reparto sí que importa, al igual que importan las horas, e importan las cantidades.
El otro tema de la tolerancia a los nutrientes de noche, también es atacado, pero hay estudios que muestran que el ritmo circadiano afecta al desarrollo del síndrome metabólico:
http://www.ncbi.nlm.nih.gov/pubmed/22705307
Y sigue…
Intenta desmontar algunas realidades, como si fuesen mitos para darte “el mejor plan del mundo” y resumiéndote que comas lo que te apetezca centrándote sólo en las calorías.
La nutrición no son sumas y restas de calorías, hay múltiples variables que este plan ha querido cargarse a la ligera de una forma bastante irresponsable, sólo con el fin de hacerlo “ameno y para disfrutar de la dieta” pero es que todo eso no es incompatible con tener en cuenta algunos aspectos de la nutrición humana, para eso estamos los Dietistas-Nutricionistas, para estudiar y enseñar estos aspectos.
Hola Aitor. Pues la verdad es que tenía aparcado el tema, pero hoy me mandaron un enlace de un postgrado de Salas Salvadó en la UB, y eso me llevo al documento de consenso FESNAD, SEEDO de finales de 2011, y como me gusta el tema de la nutrición, pues lo releí, y encontré esto(corto y pego):1.7. Equilibrio energético: frecuencia
El efecto de la frecuencia de la ingesta sobre el metabolismo ha
sido motivo de estudio activo desde hace más de 40 años(84). Es
habitual encontrar alusiones, por parte de organizaciones de salud
o libros de referencia, al hecho de comer a menudo pequeñas
cantidades de comida para evitar la ganancia de peso. Pese a ello,
existen posturas encontradas al respecto(85). La frecuencia de las
ingestas podría desempeñar un papel en la regulación de la ingesta
energética y en el control del peso corporal, pero también
podría contribuir a un mayor aporte calórico. Dicho patrón de
alimentación se ha asociado a beneficios sobre el control del apetito(
86) o a incrementos en el efecto termogénico de los alimentos(
87), pero también se ha asociado tanto a un menor(88,89) como
a un mayor(90-92) riesgo de obesidad. Un estudio halló un riesgo
significativamente menor de obesidad (45%) en individuos que
realizaban 4 o más ingestas diarias en comparación con los que
realizaban 3 o menos(93). Por el contrario, otro estudio basado en
una muestra representativa de la población de EE. UU. halló que
el IMC se incrementaba al aumentar la frecuencia de las ingestas(
91). Incluso encontramos estudios en los que no se ha hallado
efecto alguno de la frecuencia de la ingesta sobre el IMC(94).
Aunque todos estos estudios son transversales (algunos de ellos
con limitaciones metodológicas) e impiden establecer, por tanto,
relaciones causales, fomentan dudas acerca de la promoción de la
ingesta frecuente de alimentos para controlar el peso corporal.
El estudio de cohortes de van der Heijden et al.(76), al que hemos
aludido en la sección del desayuno, investigó la asociación
entre patrones alimentarios y ganancia de peso en hombres a largo
plazo (10 años), en EE. UU. Se observó que un aumento de al
menos dos momentos alimentarios en adición a las tres comidas
estándar estuvo asociado a un mayor riesgo de ganar 5 kg de peso
al cabo de 10 años (RR: 1,15; IC 95%: 1,06-1,25, para ≥ 2 vs. 0
ocasiones adicionales de ingesta).
Evidencia
7. Las investigaciones que estudian la relación entre la frecuencia
de comidas y la variación de peso corporal son inconsistentes.
En mi opinión personal: tema como la mayoría en nuestra moderna ciencia, muy abierto a la investigación, así que si está en tu mano, no dudes en hacer o proyectar un estudio sobre el tema. Y si necesitas investigadores que cooperen, cuenta conmigo. Venga un saludo Aitor.
Gracias por la aportación y por el ofrecimiento Rubén.
Sin duda, el tema de las ingestas es un arma de doble filo. Por supuesto, el hecho aislado de “realizar más ingestas dietéticas” poco nos va a decir.
Porque con esa variable no controlamos la cantidad de esas ingestas.
Como bien señala el estudio, deberían hacerse “de intervención” y con el mantenimiento de una misma energía en la dieta, pero dividida en más ingestas. (Por supuesto controlando variables confunders como picos de glucemia y lipemia).
¿Comer 5 veces al día es garantía de estar más sano que si comes 3? No.
Lo que debemos transmitir bien, es que conservando una misma cantidad de energía, repartida en diferentes tomas tendrá un mayor impacto en la termogénesis, gasto por digestión, menos picos de glucemia y por tanto podría ayudar a la pérdida de peso.
Gracias de nuevo por tus palabras y por participar en el blog de forma activa.
¡Un saludo!
Aitor, deberías saber que, de momento, no hay estudios concluyentes que respalden tu afirmación de que realizar más comidas al día pueda ayudar a la pérdida de peso. No es cierto que conservando una misma cantidad energética, el gasto por digestión diario sea mayor si hacemos más ingestas. El ETA depende de las calorías consumidas y, por tanto, a igualdad calórica y de alimentos, este gasto será idéntico hagamos 3 o 5 comidas.
Hola Jorge, ¿puedes compartir el informe de la EFSA por favor?
Me temo que hace referencia un poco a los aspectos que le he contestado a Rubén, que por supuesto, el hecho aislado de “realizar más ingestas dietéticas” no es concluyente tomando de referencia el gasto energético únicamente.
Al igual que probablemente el gasto de gasolina sea muy similar tomando en cuenta los kilómetros diarios de un coche, y estudiando la variable “paradas de descanso”, ya que hay otras variables que influyen más.
En el caso de la conducción, el estado del coche o la conducción eficiente o no del conductor determinará este gasto de combustible. Llevado al de la nutrición, otras variables como el tipo de alimento, la actividad física y la idiosincracia del menú determinará más la pérdida de peso.
El caso es que un mismo menú, por la misma persona, bajo las mismas condiciones, repartido en 5 ingestas en lugar de 3, es energéticamente menos almacenable (por glucemia y por gasto energético de digestión).
Al igual que un coche, bajo las mismas condiciones, en un mismo trayecto, bajo el mismo estilo de conducción pero con más paradas, gastará más, las relativas a arrancar más veces.
Parto de la base de que lo verdaderamente importante es mantener un patrón de ingestas ordenado y previamente establecido ( en eso seguro que estamos de acuerdo ). Pero, de momento, no encuentro evidencias de que un mismo menú diario repartido en más ingestas tenga una correlación directa con la pérdida de grasa, como tú estás defendiendo. En ese sentido te animo a que compartas varios estudios al respecto que no llegan a las mismas conclusiones a las que tú llegas:
– Wilhelmine et al. “Effect of the pattern of food intake on human energy metabolism. British Journal of Nutrition (1993) ,70, 103-1 15.
– Bellisle et al. Meal frequency and energy balance. British Journal of Nutrition (1997), 77 ( Suppl. I), S57-S70.
– Jameason D. Cameron, Mary J. Cyr and Eric Doucet. Increased meal frequency does not promote greater weight loss in subjects who were prescribed an 8-week equi-energetic energy-restricted diet. British Journal of Nutrition (2010), 103: 1098-1101.
– Leidy et al. “The influence of higuer protein intake and greater eating frequency on appetite control in overweight and obese men. Obesity (2010)
No estoy de acuerdo con lo de las 5 comidas al día. Hay varios estudios que apuntan que comer tan seguido favorecería la resistencia a la insulina y que realmente no somos máquinas programadas para irle metiendo al cuerpo alimentos de forma regular o estudiada, nuestro sistema digestivo no ha evolucionado en los últimos miles de años y no está demostrado que nuestros ancestros hicieran comiditas durante el día pues estamos más bien hechos para saciarnos que para ir comiendo de apoco, ya que el páncreas está diseñado para liberar insulina 2-3 veces al día en grandes dosis y no constantemente.
La restricción calórica o ayuno durante fases prolongadas entre 12-16 horas se está viendo que no es tan perjudicial como se pensaba hace tiempo, de hecho estamos diseñados para poder ayunar, para poder cubrir grandes distancias sin comer… creo que la mayoría de estudias se han hecho en base al concepto de sociedad moderna sin olvidar que el cuerpo tarda miles de años en generar mutaciones de adaptación, con lo que no estamos adaptados a disponer de alimentos a la carta.
Empiezan a salir ya algunos nuevos estudios sobre el efecto de comer 2-3 veces por día:
http://www.abstractsonline.com/Plan/ViewAbstract.aspx?sKey=5729427a-bf50-4c5b-b77b-59c1b0029843&cKey=efbbe9b6-4c3e-484f-bdc8-129af1de2f02&mKey=%7b89918D6D-3018-4EA9-9D4F-711F98A7AE5D%7d
http://www.cell.com/cell-metabolism/abstract/S1550-4131(12)00189-1
La mayoría de la gente que conozco y que he leído en posts que hace 5 comidas al día está todo el día con hambre o con sensación de hambre. Yo como buen cientifico he provado 5 comidas, 3 comidas y 2 comidas por día durante meses para ver los efectos en mi y te aseguro que las 5 comidas al día me daban acidez, ardores, hambre, ansiedad… ahora ando con las 2 y nunca tengo hambre, puedo alrmorzar a las 13 y cenar a las 22 y sin problemas…
En fin, que el cuerpo no es una máquina y la mayoría de estudios están financiados con intereses.
Creo que no solo sirve comer las 5 comidas al día. Es posible que te diese ardores (no voy a decir que no) pero evidentemente no sabemos lo que consumías y si realmente tenías una dieta sana, equilibrada y suficiente. Así como qué alimentos consumías y de que forma estaban cocinados. Como bien has dicho eres científico y por tanto no has dicho que seas Dietista-Nutricionista. Las recomendaciones siempre son generales pero si que es cierto que comer de forma regular favorece a nuestro organismo. Quizás lo que tu sientas que es bueno y malísimo para ti no lo sea para todo el mundo. También es cierto que no sabemos tu actividad física y también debes saber que el organismo es muy inteligente y se adapta a lo que le damos. Es como aquellos que no desayunan nunca porque dice que nunca tienen hambre. Tienen este hábito instaurado y poco a poco conforme van introduciendo alimentos a la hora del desayuno hasta tener un desayuno completo van teniendo esa sensación de hambre al levantarse. Yo personalmente realizo 5 comidas al día o como mínimo hago 4 y realizo mucha actividad física por lo que yo sinceramente si solo hiciese 2 comidas al día no podría satisfacer a mis necesidades nutricionales y si así fuese tendrían que ser comidas muy copiosas para poder comer de todo y que no me falta de nada haciendo así trabajar mucho más a mi organismo.
Esa es mi opinión como D-N
Hola! Acabo de conocer tu blog por mediación de Vitónica y me encanta. Me gustaría que algún día pusieras algún ejemplo de menú semanal de una dieta vegana para adelgazar. Muchas gracias!
Hola Barki, aquí tienes gran cantidad de información sobre ello. Es otro portal donde también escribo, espero que te sea útil.
¡Un saludo!
http://www.dietistasnutricionistas.es/dieta-vegetariana/
Madre mía qué de comentarios y tan distintos. En mi humilde opinión que tengo algo de conocimiento sobre dietética pero menos que todos los que comentan por lo que veo… Como dicen por ahí no somos máquinas, y no todos tenemos las mismas necesidades ni gustos ni fuerza de voluntad. A unos les cuesta comer 5 veces, otros no pueden pasar más de dos horas sin probar bocado, a mi personalmente me suele costar desayunar por falta de tiempo y también de ganas, que si me despertara con apetito seguro que madrugaría más para poder comer.
Entiendo que hay que ver lo que es saludable pero también intentar adecuarlo a cada persona y su modo de vida. Al final ni 3 ni 5…sino todo lo contrario, porque está visto que nadie se pone de acuerdo. Para mi…dos, dos comidas sentada a la mesa, y si puedo, dos tentempiés, almuerzo y merienda. Cuatro en total. Y es que en esto de la dieta está claro que cada día cambia la cosa así que no se puede cuadricular.
Me encanta tu blog y lo que cuentas…(también te he oído en rne), pero a veces los estudiosos de esta materia me pareceis un poco talibanes 😛 El azúcar es el demonio! Las grasas trans son sus concubinaaas!! No os dejéis llevar por el lado oscurooo! En el paraíso o esperarán 10.000 zanahorias….jaja!
Hola Buenas!
Ante todo, quería dejar claro que este es uno de los mejores blog de nutrición de España bajo mi criterio personal.
Sin embargo, pienso que este artículo en concreto debería actualizarse o dejar claro que existen nuevas recomendaciones.
Cito aquí uno de los vídeos del autor de este blog en el que habla sobre este tema.
https://www.youtube.com/watch?v=sXxTKivc88U
Además, también dice en dicho vídeo:
“Que no importe el número de ingestas no quiere decir que no importe cuando”.
(En el minuto 9 segundo 8 aproximadamente).
Vamos que en este artículo (19 marzo, 2012) se habla de que es recomendable 5 comidas al día y en el vídeo (que es más reciente -> 18 ago. 2016) se aclara que no tiene porque ser dicho número.
Saludos.
Hola Aitor,
te copio la opnión (y el link) del Doctor Jorge García Dihinx (pediatra), respecto a este artículo tuyo. Leer opiniones contradictorias desconcierta mucho a los profanos en la materia. Gracias.
El link:
https://lameteoqueviene.blogspot.com.es/2017/01/mi-analitica-personal-colesterol-total.html
Y su opinión:
No estoy de acuerdo en un montón de cosas que dice este artículo.
La mayoría de las afirmaciones con las que no estoy nada de acuerdo las espero desarrollar en una futura entrada en la que hablaré de las famosas 5 comidas.
Algunas me chirrían como eso de que para los diabéticos (supongo que habla de los tipo 2) las 5 comidas al día suponen un tratmiento, cuando es al revés. Son los periodos largos de ayuno, haciendo 2 comidas al día, los que permiten bajar la insulina en esos pacientes. En la DM II el problema es la alta insulina y la alta resistencia a la insulina. El ayuno intermitente puede proveer una cura, sin fármacos, de estos pacientes.
https://www.youtube.com/watch?v=FcLoaVNQ3rc&t=20s
https://www.youtube.com/watch?v=mAwgdX5VxGc&t=58s
Y copio aquí el siguiente párrafo:
“Tener una lipemia alta supone un aumento del riesgo cardiovascular, y las personas que tienen una alta lipemia postprandrial (después de las comidas) tendrán en sangre durante las siguientes horas más grasa circulante vehiculizada por los quilomicrones y por tanto más riesgo de incorporar al endotelio arterial materia grasa (conllevando un mayor riesgo de aterosclerosis).
Pérez Jiménez ha destacado que no sólo importa en la lipemia postprandrial la cantidad de grasa ingerida, también influye el tipo de grasa, de esta manera, la grasa saturada produce curvas más prolongadas que las insaturadas, conllevando mayor riesgo cardiovascular.”
En fin… nada más alejado de la realidad.
Los triglicéridos en sangre son resultantes de la alta ingesta de carbohidratos (que el hígado transforma en triglicéridos) y no de la ingesta de grasas. En mi caso, mi ingesta de grasaas triplica a la de carbohidratos y mis triglicéridos son de 60 mg/dl, bien bajos.
Además habla de la hipótesis lipídica de las grasas saturadas y la enfermedad cardiovascular, cuando nunca ha sido probada esa relación. El origen de la enfermedad cardiovascular es inflamatorio, no por ingerir grasas saturadas.
Me parece una sarta de disparates.
Es la grasa la que nos sacia y no los carbohidratos.
Los carbohidratos son “de corto recorrido” con una rápida subida de glucemia y bajada posterior por medio de la insulina, lo que nos da hambre de nuevo en pocas horas. El negocio de la industria alimentaria.
La grasa es como la leña en el fuego, que dura. Los carbohidratos son como paja, como papel. Prenden rápido, pero se consumen rápido y debes de poner continuamente, 5 veces al día, para mantener el fuego.
Habla de los cambios bruscos de glucemia.
No ocurren por tomar 3 comidas sino por comer azúcares refinados.
Con una señora tortilla no tienes cambios bruscos de glucemia y puedes aguantar, sin hambre, tomando 3 comidas al día, sin necesidad de almuerzo o merienda.
En fin, espero poder desarrollarlo en la próxima entrada del blog.
El artículo en sí, en mi opinión, es completamente opuesto a la realidad.
Jorge
Excelente artículo
hola Aitor, me gusto mucho lo que comentas, algo que siempre nos repitieron en la universidad o por lo menos a mi es que muchos tiempos de comida acelera el metabolismo, me he puesto a investigar y no he encontrado mucha información al respecto, por lo tanto no se de donde salió ese comentario, si sabes algo al respecto me ayudaría montones, gracias!