Vivimos sin duda en un entorno en el que la gente y especialmente las marcas buscan llamar la atención con sus acciones en Redes Sociales. Las empresas buscan Community Managers que siembre la polémica, que tengan acciones notorias en la red y que se hable de su trabajo.
Sinceramente, Qé palmeras de chocolate lo ha conseguido hoy, porque precisamente aquí estoy hablando de ello. Por un momento pensaba dejarlo pasar para no darle más visibilidad a la acción, pero creo que se merece una reflexión.
El suceso en sí mismo ha sido una consulta que ha hecho un twitter un seguidor, que estaba pidiendo ayuda y consejo sobre cómo combatir la ansiedad por comer que sufría.
Ante esa situación, ha entrado en juego la cuenta Qé, palmeras de chocolate para afirmar que “de vez en cuando una palmera de chocolate ayuda a bajar la ansiedad”. Seguida de una invitación y llamada a la acción con un “¿te animas?”.
Que quede claro de antemano que no soy una persona falta de sentido de humor, creo que muestra de ello son muchas entradas de este blog, así como muchos vídeos de youtube. Yo mismo tiro de sátira y de ironía en redes sociales, al igual que pienso que el usuario de twitter ni siquiera se lo haya tomado a mal, y lo habrá encajado correctamente. El problema es que el community manager no puede prever eso, y por tanto no sabe qué reacción puede tener en esta persona.
Teniendo en cuenta esto de partida, me parece un profundo error recomendar comida basura, ¡una palmera!, a una persona que está pidiendo ayuda en internet para combatir su ansiedad.
- Creo que no es el momento de hacer la broma,
- Creo que no es el tema con el que hacer la broma,
- Creo que no es la persona con la que hacer la broma,
- Creo que la industria del producto procesado no es precisamente el agente más indicado para hacer la broma.
¿Por qué la industria de alimentos ultraprocesados es la menos indicada?
Dadas las propiedades hedónicas y de refuerzo de los alimentos ultraprocesados, los alimentos hiperpalatables pueden servir como “alimento de confort” que actúa como una forma de automedicación para disipar la angustia no deseada. El estrés crónico suele ir acompañado de ansiedad, depresión, apatía y alienación. Además, los estímulos del entorno (como puede ser la disponibilidad o los anuncios) activan el sistema nervioso facilitando este comportamiento.
Los individuos que se encuentran en estados afectivos negativos consumen más alimentos “hedónicos” muy concentrados en azúcar y grasa de calidad nutricional muy baja. Hablar por tanto de palmeras de chocolate a una persona que reconoce tener ansiedad es a nivel científico una irresponsabilidad bastante grande.
Afrontando los problemas de nuestra relación con la comida
Estamos en un entorno en el que a las personas nos cuesta muchísimo reconocer que tenemos un problema, y también que hay grandes barreras de entrada para empezar una terapia o un tratamiento con ayuda profesional.
A mí me parece valiente y un paso importante animarse a pedir consejo sobre qué hacer, y finalmente aceptarlo y reconocer que vas a tomar ese camino. Y en esa fase, y tras esa decisión, probablemente lo que menos necesite una persona es a una cuenta de palmeras de chocolate diciendo que puede recurrir a ellas cuando se encuentre con ansiedad o, como aquí se puede leer:
“Que en caso de que no funcione” acabar consumiendo las mismas.
¿Dónde está el límite entre la broma y la responsabilidad?
Seguramente sea muy difícil de definir, y no necesariamente tenga que existir el mismo límite para todas las situaciones y personas, pero personalmente pienso que frivolizar sobre este tema y en estas circunstancias es poco ético y está fuera de lugar.
Es un episodio más que un gestor de redes sociales se podría haber ahorrado para hacer la gracieta. Una anécdota desagradable que hace que ahora estemos hablando de ello.
No todo vale cuando hablamos de salud, mucho menos sobre salud mental.
Esteee… si la solución más sana no funciona, la malsana tiene poco futuro.
-Me caí de la bici y tengo una herida en la rodilla.
-Pues toma un martillo y le atizas si no se cura con agua oxigenada.
En mi opinión, para problemas emocionales que no están concluídos, el chocolate -el de buen porcentaje, digo- es un parche temporal. Claro que puede calmar la ansiedad pero no arregla nada. Hay que distinguir el combatir contra síntomas y contra problemas.
Un saludo
Por cierto, yo no he visto ninguna broma ahí. El tipo va a vender, esto es la nueva puerta fría.
¿Sabes, Aítor? Las personas no entienden el problema y sin embargo opinan…igual que en un partido de fútbol, en que todos somos mejores que el técnico….¡ufff!
Hemos llegado al momento en que demasiadas personas, de todas las edades, padecen obesidad y no saben qué hacer porque para su desgracia, han aparecido en todos los canales de televisión del mundo, los aprovechadores que ofrecen “dietas milagro” con diferentes nombres y juran que son la solución porque bajarán diez kilos semanales…y como somos muy cómodos les creemos, dado que soñamos que sin trabajo, sin pasar hambre, lograremos la meta…
Hay que explicarle a las personas que si demoró diez años en subir de peso sin darse cuenta, no puede pretender bajar esos kilos de un plumazo sin modificar su relación personal con la comida, y para eso hacen falta más blogs como este, y más intervenciones en radio y televisión de profesionales serios y honrados como tú.
Madre mía, ha sido totalmente como ver a una persona pidiendo ayuda para dejar las drogas y el camello ahí detrás, pinchando y picando para evitar que consiga su propósito, jajajaja. Cada día me da más repelús la industria alimentaria.
A mí no me salen las palabras de lo flipada que estoy ahora mismo. Y te lo digo yo, que de mis problemas de ansiedad tú sabes un poquito y algo más. Pero flipada. Madre. Qué bestialidad.
Seamos sinceros. Necesitabas sacar un post y has tirado por lo sencillo. La primera persona en hacer la broma ha sido el afectado. Aquí todos se flipan y todos sacan los puñales pero nadie quiere analizar al 100% el hilo y eso es feo.
Lo dice uno que tiene un afectado por trastorno ansioso depresivo al que le da por comer. No nos tratéis de personas que no sabemos controlar nuestra capacidad de raciocínio. No controlamos la ansiedad pero no somos idiotas. Sabemos interactuar de buen rollo con cosas así.
Una cosa: Porque tú tengas una persona a cargo con problemas de ansiedad ¿ya eres el representante y portavoz del mundo mundial sobre este asunto?
Además, ¿es la ansiedad una condición exclusiva de quienes la proclaman a viva voz?
Parece claro que, si la mayoría de los que se han pronunciado sobre la actitud de la empresa, lo han hecho de forma negativa y con argumentos -incluyendo a profesionales del ramo- es que puede ser un caso de comercial sin escrúpulos o muy poco tacto.
Y la primera persona en decir que, pese a todo, seguirá el consejo de Aitor ha sido el afectado.
Mmmm yo soy la persona afectada. Yo puedo hablar por mí y no necesito que ningún bloguer me represente. Y la primera persona en hacer broma sigue siendo el afectado. A ver si nos despertamos
Es que si hablas de ti en tercera persona: “Lo dice uno que tiene un afectado por”…
¿Tú no comprendes que hay veces en las que se aceptan bromas por convención social, por no parecer hostil o seco? Reitero, la petición se dirigía a Aitor y la primera persona en aceptar la sugerencia de Aitor también ha sido el afectado.
No voy a seguir porque esto ya es conversación de besugos.
Como bien expones Aitor y se ve en la imagen, dicha persona te estaba consultando a ti, una persona entendida y con experiencia en nutrición.
En twitter se entiende que cuando pones el usuario primero, le estás consultando a ese usuario. Que yo vea no lanzó un tweet público diciendo “alguien me puede ayudar con alguna idea para superar….”. Hizo una consulta directa.
Y la respuesta de la marca es, aparte de tirar a sus propios intereses dando información irresponsable, “meterse en una conversación” a donde no le han invitado. Afortunadamente el usuario muy elegantemente respondio diciendo gracias por “ayudarme”, yo quizá hubiera sido mas tajante y hubiera respondido: “Estoy preguntándole a tal usuario”.
A donde han llegado las normas básicas de conversación!
Es increible a lo que estamos llegando con las redes sociales hoy en día, pero como veis las marcas y sus community manageres tienen monitorizados a los principales influencers en su nicho de mercado, para salir al paso y poner sus productos por delante a la primera de cambio.
Excelente artículo y comentario Aitor.
Lógicamente para ellos no es “frivolizar”. Es su producto, y tienen que venderlo, cosa que para ellos es muy seria. Si le dices a un directivo de Qé! que su comida es “comida basura”, además de (previsiblemente) enfadarse bastante, te explicará mil y un motivos por los cuales no es así (aunque ni él mismo se lo crea). Es pura cuestión de negocios… lo mismo ocurriría si le preguntas a un directivo de la industria de las armas o el tabaco.
La verdad que super interesante los que comentan aqui, muy enriquecedor. Saludos
Me parece muy fuerte el comentario de la marca de palmeras.
Yo también llevo una temporada con gran ansiedad por la comida, por suerte no me da por las palmeras pero, cuando dices ayuda profesional, te refieres a psicólogo? O los nutris también podéis ayudar con eso?
Para muchas personas el chocolate es como una droga…hay que recordar que las antiguas civilizaciones lo usaban como estimulante…asique funciona como antidepresivo pero a la vez es dañino en exceso.
Yo uso el sexo como antidepresivo…mucho mejor y más sano que el chocolate..rico rico
Esto me parece una solucion temporal, ya que a larga puede convertirse en algo perjudicial depender del chocolate para calmar la ansiedad
Pues a mi me gustó el artículo.
No entiendo tanta polémica.