Hoy me ha vuelto a pasar, he agachado la cabeza y simplemente lo he encajado como otras tantas veces, no tenía ganas de discutir, probablemente me esté inundando de nuevo la desilusión…
Llevo años intentando engañarme a mí mismo, pienso y me digo mentalmente “son unos pocos docentes”, “no son todos así” pero ya van muchas veces. De nuevo, hoy, 80 personas se han puesto a copiar un texto que estaba proyectado en la pared; de forma simultánea podemos escuchar durante 60 minutos como una voz se limita a leer en voz alta esas frases, una vez, y otra segunda más despacio.
El rebaño lo copia, y pasamos a la siguiente diapositivia, los minutos se consumen poco a poco… otra hora desperdiciada, la oportunidad que nos brinda juntarnos casi 100 personas con algo de trayectoria en la espalda se esfuma. Un nuevo cartucho docente desperdiciado. Aburrir en una clase es un crimen.
En mi vida universitaria he estado gran parte sentado en aulas, gradas, bancos, taburetes de laboratorio… intentando sacar provecho de esas horas cargadas de pasividad.
He probado distintos formatos docentes: prácticas sin sentido, seminarios que se limitan a cambiar de aula y dividir la clase en dos; debates que en realidad eran clases magistrales… me he metido en la piel de estudiante universitario a todos los niveles: diplomatura, grado, licenciatura, máster y doctorado. Ahora sigo formándome para poder ofrecer mañana cosas distintas a las que me han brindado la gran mayoría de mis docentes.
Seis años, distintas titulaciones, diferentes universidades, empezando nuevos proyectos con ilusión, y la amarga realidad vuelve a alzarse ante mis ojos.
Excusas, excusas baratas para justificar prácticas muy recurridas, antipedagógicas a todos los niveles, transparencias desactualiadas, diapositivas soporíferas o incapacidad docente… Casi todas relacionadas con la pasividad o el egoismo, sí, egoismo; ese sentimiento que te transmiten cuando ver una clase llena, callada y escribiendo es más importante que los conocimientos que haya dentro de las cabezas.
Si hay una práctica que me duele en el alma, es la de ir a clase para copiar, una hora dedicada a escribir en un papel palabra por palabra lo que un docente lee de sus diapositivas nivel amateur. Inocentemente, alguien levanta la mano por el bien de las muñecas colectivas, se le ha ocurrido que a lo mejor atendiendo a las “explicaciones” podemos estar más relajados y darle vueltas al coco.
-“Disculpe, ¿va a compartir las diapositivas? ¿estarán disponibles los apuntes?”
-“No, porque si no, no me escucháis.”
La contestación más adecuada ante esa observación debe ser “Efectivamente, si tus clases se van a limitar a repetir 3 veces cada una de esas frases, sin ampliar ningún dato adicional, sin dar un atisbo de relación con la realidad… nos ahorramos todos el esfuerzo”.
Entre esta colección de docentes también podemos deleitarnos con la fobia a la tecnología, hoy se ha juntado todo, y de paso nos hemos dado de bruces con la reticencia a tener ordenadores en clase justificado en “Porque no puedo saber qué estáis haciendo con ellos, si tomando apuntes o haciendo otra cosa…”.
Iluso de mí, personalmente desconocía que el folio en blanco y un bolígrafo eran garantía de atención y aprovechamiento. La creatividad remanente en nuestros secos cerebros probablemente permita a los alumnos inventarse un “ahorcado” o un laberinto a pesar de no contar con un portatil delante, y si no, podrían pintar símbolos fálicos en los bordes de la hoja.
A lo mejor el que está loco soy yo, que le tengo un aprecio especial a mi tiempo; ese mismo que podría dedicar a mejores tareas investigadoras que a transcribir lo que escucho.
Creo firmemente en la docencia y en la educación, es más, amo la educación, le dedico toda mi dedicación voluntaria, y por ello me fastidia que la docencia universitaria me siga desilusionando tanto. Ya sea desde una pizarra, a los mandos de un ordenador pasando diapositivas, o al lado de un proyector de transparencias, no soporto ver como se destripan disciplinas maravillosas, haciéndolas cruelmente intragables y se reduce la motivación del alumnado a un cero absoluto.
Esto es la pescadilla que se muerde la cola, no sé si la desmotivación docente provoca la del alumnado, o viceversa. Pero me amarga llegar a clase y ver a 80 personas y a una con bata sentir que los próximos 60 minutos que tienen por delante van a ser una obligación.
La cuna del conocimiento, el “Alma mater”, ese término que pretende significar “un todo, algo universal, unidad”. Esa institución que aspira a formarnos como profesionales y personas. Cada día me toca más… la moral.
Año a año descubro docentes muy buenos, pero la rutina en lo malo es una constante. Mi más profundo respeto a aquellos y aquellas que habéis conseguido que hoy esté aquí, y los que me motivan día a día; al resto simplemente recordadles que esto de transmitir es más complicado que superar un peer review.
Con lo facil que seria crear un organismo de auditoria docente….que pase “revista” a la LABOR DOCENTE, y si no vales o no cumples con los objetivos (al igual que en cualquier empresa) a la calle con una palmadita en la espalda! Lo peor de todo es que los diplomados en Magisterio, licenciados y con un máster (entre los que me incluyo) por más que opositemos (si se abren las listas) nos costará el doble entrar al sistema con ideas nuevas, pues dentro estan de forma “blindada” mil profesores de los que describe el articulo!!
Un saludo y gracias por compartir este POST!
No puedo estar de acuerdo con esta propuesta, o por lo menos no al 100%. La labor de un buen docente no es cuantitativa sino cualitativa. Una asignatura puede ser muy difícil, tener un alto índice de suspensos y, sin embargo, tener un muy buen docente. Sucede lo mismo en el caso opuesto: Una asignatura con un alto índice de aprobados puede tener un muy mal docente.
La labro de calificar un aspecto cualitativo y no cuantitativo no es una tarea trivial…
La labor de un docente es la misma de un entrenador de un equipo de fútbol, sacar el máximo potencial latente en sus pupilos. Si tenemos malos entrenadores así jugamos luego en la vida real…
A los interesados en el cambio de paradigma docente recomendarles sirkenrobinson.com/skr/pdf/allourfutures.pdf . En el informe se habla largo y tendido sobre un asunto clave: la educación debe consistir en potenciar las áreas creativas que mejor domine el alumno. Si cada profesor adorase su trabajo y tuviese un mínimo de empatía en vez de contar sus batallitas viviríamos en una sociedad bastante diferente….
Gran artículo, recoge el sentir general del estudiante.
Pero ¿alguien se esperaba más de funcionarios públicos?
Yo dejaría la docencia en manos de DOCENTES con motivación, capacidad y aptitud demostrables, exigiría esos requisitos para ser contratados y exigiría después calidad en la docencia y resultados positivos. Si la universidad requiere investogadores, que los contrate exclusivamente con esa función. Los demás, a la puta calle. El prestigio de la universidad española sólo se entiende en términos de publicaciones y méritos de investigación, no en resultados académicos de los estudiantes. Además, la mayoría del profesorado son dinosaurios anclados en el pasado, incapaces de transmitir conocimientos y emociones, metidos en las rencillas interdepartamentales y politiqueos sucios. Lo peor es que son inamovibles, no se merecen seguir ahí y todos miran hacia otro lado. Así nos va.
Enhorabuena Aitor. Tras tus precisas y reveladoras palabras, flota ese sentimiento de impotencia que tantas veces he tenido y que tú explicas tan bien. ¡Cuántas veces he esperado entre mis compañeros a alguien con el mismo sentir! Pero al levantar la cabeza solo veía a robots que se limitaban a copiar.
Felicitaciones, no sólo, por tu entrada en el blog, sino por los comentarios. Me alegra ver que en el sistema educativo que tenemos hay personas que reflexionan, motivadas por aprovechar el tiempo y por formarse.
Un profesor tenga o no, otras obligaciones, tenga o no, otros medios de apoyo, tenga más o menos conocimientos, puede hacer de una clase una obra maestra. Sólo se necesita vocación. Tener ganas de enseñar es lo importante. De esta forma nos hemos encontrado a lo largo de nuestra carrera universitaria verdaderos maestros en el arte de comunicar. De lo contrario, si las ganas de enseñar no son la prioridad, uno se esconde tras su maletín, coge los apuntes y dicta.
Para terminar, decir que, cuando empiezas a trabajar buscas las mismas ganas y vocación de tus superiores, y OH!, sorpresa, te encuentras con el mismo problema de estudiante. El parking lleno de coches apuntando hacia la salida para no perder ni un segundo más en su jornada, aburrida,repetitiva y sin imaginación. con miles de trabas burocráticas que complican la vida a los usuarios.
Así que uno tiene ganas de terminar la carrera para trabajar y se encuentra con los mismos personajes, posiblemente alumnos aventajados de “los profes” a los que nos referimos.
Ver vuestros comentarios me anima.
Gracias a todos.
Yo aquí veo mucho fanboy que dice aburrirse en clase y quiere comentar la mancha de los pantalones del profe vía twitter y es vago hasta para saber que le gusta.
En el pasado he sido un estudiante más de esos aburridos. Mi única aspiración a mi temprana edad era holgazanear en lo máximo posible. Es cierto que hay malos profesores que encima enseñan cosas que a mi no me interesaban. En estos casos me iba al bar y luego me limitaba a aprobar. Finalmente, de algunas de esas aburridas clases para muchos acabé descubriendo mis motivaciones y fui yo quien empecé a tirar de la cuerda. Tengo que decir que fui bien atendido y encontré un pozo de conocimiento. Luego pasé al doctorado y allí encontré algo motivador que me permitía desarrollar mi creatividad.
La universidad me curtió. Me enseño a pensar y a buscar estrategias para resolver problemas (que no me interesaban). Me enseñó a palmar, a hacer prácticas de las cuales no sabia nada en tiempos récords. Cómo informáticos, los que luego, vais a trabajar esta es la mejor cualidad que podéis aprender a la universidad XD.
Por otro lado, durante mi tesis, di clases. Mi gran sorpresa fue que el 50% de los estudiantes, no saben leer!! no tienen comprensión lectora. Ni capacidad de concentración. Es ALUCINANTE. El problema viene de mucho antes. Por otro lado, en el 50% restante he visto alumnos normales y muy brillantes. Los he visto a los que simplemente no les ha interesado y han pasado de largo. Totalmente licito. He visto otros que les ha fascinado el tema y se han vuelto realmente expertos en ello. Primero con mi ayuda y luego se han vuelto totalmente autónomos. Yo no veo que esto sea un fracaso. No podéis pretender que todo el mundo se fascine por todo y más cuando la mitad son analfabetos. Por mucho que uséis twitter para dar clases no lo vais a conseguir ni debe ser el objetivo.
Finalmente, para los que os quejáis de las herramientas. En la universidad no hay que aprender un curso de Android, usar Git o pollas en vinagre. Hay que aprender a pensar, ser critico y conocedor de muchas áreas desde lejos. Para tu luego ser capaz de aprender solito Android o lo que te salga de ahí. Pero tranquilos, que con los nuevos grados ya han transformado Ingeniería Informática en un curso web + programación smartphone…
saludos
Mí caso es un tanto particular puesto que he sido docente y alumno a la vez. Te doy la razón cuando dice que en la universidad no deben darte unos “conocimientos explícitos” ( Android, Git,… ) y aún más cuando afirmas que hay alumnos que son holgazanes inclusive para querer descubrir lo que les despierte la pasión. También te doy la razón cuando comentas que el 50% de los alumnos carecen de compresión lectora y esperan que se les de todo bien masticado. La sociedad en sí crea estos “errores” (me refiero a la situación, no a las personas). Pero igualmente genera todo un cúmulo de profesores que deberían tener vetado el acceso a la docencia: Profesores que carecen (totalmente) de educación, con limitadas capacidades comunicativas, tan frustrados de ellos mismos que acabar por infectar a los pupilos con esa frustración por muy motivado que vengas de casa.
La Universidad debería ser el modelo a seguir, transmitiendo todo un conjunto de aptitudes que permitan al alumnado aprender y progresar para poder formarse con la ayuda de la docencia y de forma autónoma.
Hola Johan,
En una asignatura me hacen usar un sistema de control de versiones. El profesor dijo que usaríamos CVS… y le propuse usar Git en su lugar. Si no conoces CVS, mejor para tí: he estado una semana entera haciendo comparaciones y buscando información por las tardes y la conclusión es aplastante: Git es mil veces mejor que CVS (en Wikipedia en inglés hay una tabla comparativa, por ejemplo, busca por ahí si quieres más información).
El problema no es aprender o no Git. El problema es aprender herramientas desfasadas. No me vale lo de: para conocer la actualidad hay que conocer el pasado. ¿A que no usamos ábacos teniendo calculadoras? En el fondo, los dos funcionan para lo mismo, hacer cálculos numéricos…
Mi queja no es aprender nuevas tecnologías. Mi queja es que no se fomente la creatividad de los alumnos. Que te enseñen cosas obsoletas y tengas que aprender por tu cuenta las versiones actuales. Que te obliguen a hacer las cosas de una manera cerrada, sin margen a la improvisación.
Estarás de acuerdo conmigo, espero, que la mejor manera de aprender es haciendo. Las clases de teoría están bien, pero lo que cuenta en el fondo es saber aplicarla. Ahí es dónde entra la práctica. Pero cuando la teoría está desfasada, la práctica también lo estará, por lo que estarás desaprovechando tu tiempo pudiéndolo emplear para aprender nuevas herramientas que sustituyan las antiguas.
No digo añadir temario. Digo modernizarlo. Cambiarlo. Actualizarlo.
Hola Marc,
Entiendo tu inquietud por la tecnología. Entiendo que en ese caso particular Git sea mejor que cvs y puestos a hacer, porque no Git?. Seguro que eres una persona inquieta , creativa y aplaudo que hayas hecho tus propuestas al profesorado. Espero que te hayan escuchado. Yo lo haría y mucha gente que conozco también. Simplemente te intento transmitir que la tecnología es irrelevante. Yo terminé la carrera sin saber que era un sistema de control de versiones. Cuando fui a trabajar aprendí a usar estas herramientas sin darme cuenta que lo hacia. Respeto las calculadoras, no uso una des de la escuela, no hace falta para hacer Ingeniería Informática 😉 y saber usar un ábaco es algo que no me hubiera importado aprender. Lo que importa es aprender a pensar, aprender a resolver problemas, aprender a esforzarte, a trabajar bajo cierta presión, descubrir inquietudes y desarrollar tu creatividad. Lo que tiene valor es eso. Para esto da igual si usas un sistema de control de versiones mejor que otro, o simplemente no lo haces, o calculas una integral. Todo eso son excusas para desarrollar estas cualidades. Con eso no pretendo que dejes de querer implantar un mejor cvs en tu clase, todo lo contrario. Solo intento hacerte ver que lo bueno de esta situación es como lo has resuelto, y que realmente daba igual lo que se usase en esa asignatura.
PD: Yo tb tengo pasión por ruby 😉
Saludos
Lo más cierto que he leído en toda la semana. Hay que buscar buenos profesores porque te cambian completamente la asignatura, y justo he empezado este año y se me han juntado un profesor que sin dudas puedo decir que es el mejor que he tenido en mi vida, y otro que de igual manera puedo decir que es el peor.
Una pena porque este último es de una asignatura que me gusta mucho y que la está haciendo un poco insoportable.
Puedo decir que el enchufismo es la gran parte de culpa de todo eso que comentas…
trabajo en la Universidad de Málaga y como dices hay de todo, pero es INCREÏBLEE ..
Lo que yo te diga, si es que aún protestamos poco. Eso sí, en cuanto lo hacemos nos convertimos en el enemigo. Con lo fácil que es hacerlo todo con sentido común. Me consta que se pueden dar clases divertidas, y si no, al menos constructivas. Pero destructivas (del tiempo) me niego a aceptarlas (salvo que no me quede más remedio, que es el caso).
Estoy contigo, ojalá nosotros sepamos hacerlo mejor.
No sólo pasa en la enseñanza universitaria, también en los ciclos formativos. Que se dejen de tanta oposición y los criterios de selección del profesorado encuentren otro camino más productivo, por favor.
La universidad española ha sido la mayor decepción de mi vida. Imaginaba debates, compañeros con afán de aprender e investigar (pocos encontré, pero aún hubo alguno), profesores que te acompañaban en el aprendizaje y se enorgullecían de los avances y méritos de sus alumnos…
A pesar de ser buena alumna toda la vida y tener mi familia unos ingresos apenas por encima del umbral de la pobreza, la falta de becas reales (no ayudas que te dan para 4 meses de autobuses) provocó que no pudiese moverme de mi ciudad ni mi país. Sufrí lo que comentas, una y otra vez. Soporté hasta tercero de carrera, curso que me pasé en la puerta de la facultad, tomando cervezas toda la mañana. Ese curso descubrí un truco: cuanto más extraño fuese el título y el tema de los trabajos obligatorios, más nota sacarías, aunque el trabajo tuviera lagunas metodológicas o, directamente, te lo inventaras de la primera palabra al punto final.
Me harté de “profesores – colegas” que te contaban su vida en lugar del temario. De profesores que daban unos apuntes y exigían en el examen los del año anterior, palabra por palabra y coma por coma. Exámenes tipo test que se corregían con plantillas incorrectas, año tras año. Me harté de tener razón y no plantearme nunca el reclamar ante el Jefe de Departamento, sabiendo que el corporativismo acabaría en mi contra.
¿Solución? Ir a clase cuando el plan bolonia lo exigía porque si no te quitaban un porcentaje bastante alto de la nota. Y, en esos casos, sentarme al fondo, a leer una novela. Estudiar por mi cuenta para aprobar y tratar de hacer lo que me viniera en gana en prácticas y trabajos, siempre que los cuadriculados porfesores me dejasen. Y, en mi tiempo libre, investigar y aprender por mi cuenta.
A quienes vayan a empezar la universidad, el próximo curso, el consejo que les daría es: Si tienes dinero, márchate fuera del país. Y, si no lo tienes, busca la facultad menos mala, trata de aprender todo lo quie quieras y puedas por tu cuenta, y todo mi ánimo.
Saludos, muy interesante el comentario. Una reflexion muy profunda sobre la realidad que se vive en general en todas las instituciones de Educacion Superior. La critica dirigida al punto, pero, la solucion??
Es maravilloso criticar y opinar sobre algo que no gusta, se quiere cambiar el mundo pero como lo hacemos??
Gracias a esas clases aburridas hoy estan en su puesto de trabajo, gracias a esas clases tediosas hoy muchos tiene el pan para dar a sus hijos, gracias a esas clases sin sentido con diapositivas que no se compartian hoy muchos pueden viajar gracias al conocimiento adquirido y al dinero generado por el empleo o el trabajo independiente.
Que delicia es criticar, que dificil es dar soluciones.
Hay que aprender de cada situacion de cada momento de cada individuo.
Cuando dejemos de ver en el otro el culpable y no nos apersonemos de la problematica a nuestro alrededor, el mundo cambiara. Cuando veamos el valor que cada individuo tiene, al fin alcanzaremos la supremacia que estamos esperando.
Los mejores deseos en este viaje de la vida. Disfrutemoslo, aprendamos, compartamos.
La solución sólo la puede aplicar aquél que se encuentre ante una clase. Encontrar una? No la hay, hay muchas. Culpable el otro? No, culpable es aquél profesor que sabe que está dando mal una clase. Créame, lo saben.
Cuando fui docente me instaron a dar “mis” clases de un modo determinado y preferí no hacerlo. Dí “mis” clases de forma distinta, un poco más dinámica. Con un poco más de comunicación. Sólo aquellos cambios que “me dejaron hacer”. ¿Cuál fue el resultado? La mayoría de mis alumnos aprobó la asignatura con buena nota porque habían aprendido en vez de memorizado. Habían sido capaces de comprender los problemas a los que los enfrentaba en vez de buscar “el modelo de problema” en los apuntes o diapositivas. Comprendieron el valor del trabajo que les pedía y por ello lo realizaban (inclusive más del que se les pedía).
La solución la tienen los actuales docentes. Pero claro, aplicarla significa un esfuerzo. Buscar, encontrar y exigir un cambio. Pero todo eso es demasiado trabajo… no olvidemos que “spain is different”.
(corrección)
Cuando dejemos de ver en el otro el culpable y nos apersonemos de la problematica a nuestro alrededor, el mundo cambiara.
Chapeau. Soy docente Universirario y no puedo estar más de acuerdo con este excelente artículo.
He sido alumno universitario durante casi 10 años y he revivido momentos de mi etapa universitaria leyendo esto. Gracias y de nuevo enhorabuena.
Excelente artículo, muy cierto además. Muy pocos profesores recuerdo que me hayan dejado una marca en lo que aprendí, a esas excepciones que tanto me enseñaron hoy les llamo colegas y amigos, de los demás ni me acuerdo. De los debates y tormentas de ideas surgen grandes aprendizajes, de evaluar y conocer, de comprender lo que piensan aquellos que te rodean y establecer un criterio propio y una definición de un tema. Pero esto es imposible mirando una lámina como borregos. Me gusto mucho tu articulo. Saludos desde Venezuela !
Reblogged this on yonko248.
Excelente Blog!, me ha interesado mucho tu blog, creo que de ahora en adelante lo visitare a diario, si quieres visitar los mios ahy los dejo…
Una buena forma de asegurarse de que a todos los profesores les importe de verdad la formación de sus alumnos sería realizar pruebas externas al centro (como las PAU) y determinar el sueldo que tendría el profesor en función de la media que tuviese su clase en ellas (estoy de coña, soy consciente de que hay buenos profesores que se preocupan por darles la mejor formación a sus alumnos, pero a más de uno creo que eso le vendría bien para plantearse su forma de enseñar).
Ah, y eso que dices del miedo a las nuevas tecnologías es taaaaan cierto, nos deberían ver como un peligro y no personas con deseos de formarse, no entiendo como nos dejan tener un boli en la mano PODRÍAMOS ENSUCIAR LAS MESAS CON GARABATOS, es más creo que nos deberían tener toda la hora de pie, formando filas y repitiendo las frases que ellos dicen al unísono como si fuésemos un coro, eso si sería más adecuado.
Chapeau..!! BRAVO (Estudiante de 5º de Livcenciatura)
Simplemente brillante.
Lamentablemente esto pasa desde la escuela, pasando por el instituto y terminando en la Universidad. Es uno de los motivos por los cuales un gran número jóvenes no encuentran la motivación, el beneficio o el provecho en el acto de estudiar; por el que potenciales talentos se quedan en el camino y los que destacan notablemente, como es tu caso, finalmente y desilusionados con nuestro sistema educativo encuentrar una fuente de ilusión en Universidades fuera de nuestras fronteras. A estos tipos de docentes y por supuesto a políticas poco acertadas de apoyo a la investigación, desarrollo y creación de nuevas formas de sostenibilidad económica les debemos que la mayor aspiración de muchos españoles en edad de emprender y trabajar sea el ser funcionario.
Y sí los hay muy buenos…yo el mejor lo tuve en el colegio. De los que me encontré en el resto del camino por cortesía ni hablo. 6 horas de clase por 5 días a la semana por un montón de años = un trastero lleno de folios.
Pero soy afortunada. Tengo trabajo y sobre todo salud, que es por lo que tú, mi querido hermano, tanto estudias y te precupas.
Yo estoy haciendo un grado superior de asistencia turística y la cosa no solo está igual, si no que podría atreverme a decir que está peor. Parece que es un mal común en este país. Tengo fé que algún día se darán cuenta en que el problema no sólo son los alumnos.
Reblogged this on Don Temón and commented:
Básicamente, la realidad del sistema educativo Español
Acabo de hacer una entrada en mi blog sobre esto 😀 Gracias por la inspiración ^^
http://rrcubiella.wordpress.com/2012/02/25/no-me-toques-los-powerpoints/
Tienes toda la razón, pensé que yo solo lo veía así, pero creo que avanza el que quiere, y el que tiene el hambre de aprender; no se queda solo con la enseñanza que el profesor le da, que a veces es nula.
la mierda de profesores +la mierda de alumnos = mierda social.
se ha pervertido el fundamento de la formacion superior (para algunos)y se ha convertido en educación (para todos) se ha democratizado esto es ha pasado a ser una de las necesidades basicas de una sociedad el profesor ha pasado a ser un servidos publico y el suspenso sometido a consensos politicos .
Cierto que hemos perdido la venda y la universidad del pasado no solo fabricaba las elites filtrando por conocimientos sino que hacia dirigismo ideológico pero la solucion ha sido hundir el barco .
La enseñanza media le diran motivadora pero salvo sigue haciendo lo mismo que antaño en pocos casos no ha mejorado pero eso no se hace cambiando leyes y decretos se hace desde la universidad en algun sitio debe estar el comienzo de la regeneracion y es la exigencia universitaria, pero ahora esta atada de pies y manos por el primum vivere
Por desgracia tienes razón y me he sentido identificada en muchas de las cosas que comentas. Solo decirte como anécdota que tuve un compañero en la universidad, que al llegar clases de estas como las que indicas y como le cundía copiar (como a mí.. ignorante de la vida en aquellos entonces) se dedicaba a hacer caricaturas de los profes y de los alumn@s en los márgenes, los que estábamos a su lado nos divertíamos ese rato. Cuando acabamos la carrera, los recopiló todos y lo convirtió en un comic. La caña! Algo bueno tuvieros esas clases 😉
Buen apunte. Algo positivo puedes sacar de estas experiencias:
Un día, sin casi darme cuenta, cambié de bando. Ahora yo estaba en la tarima y otros escuchaban. Me hice dos promesas:
1. Nadie saldría de mi clase sin saber algo que antes no sabían.
2. Nadie si aburriría si era yo quien daba la clase.
No se si lo he conseguido al 100%, pero estoy en ello.
Bueno pues no puedo dejar de leer tu post y quedarme parada, necsito decir que tienes razon.
Y conste que nuestras profesiones no son las mismas y sin tener nada que ver enseñamos de alguna manera a estar mejor.
Tu con la nutricion yo con la estetica de piel y cabello.
Tambien yo estoy luchando hace unos 3 años contra la monotonia de libros de texto y doy clases teoricas mas interactivas. Veo como rstudiantes
desgraciadamente esto es así, no que quisiera que fuera, pero hace mucho tiempo que se perdió la motivación de parte del maestro, quizás deberíamos comenzar por él, si al maestro no le gusta lo que hace,¿cómo es que va a motivar a su audiencia?…
Lamentablemente esto no es solo en la universidad, va desde antes, vemos maestros de todo tipo, hombre, hasta los que se duermen en su propia clase… eso sí que es una ridiculez…
Y como alumno hay que recordar que no podemos justificarnos, debemos hacer algo por nosotros mismos y resaltar muchísimo mas que el maestro, salir adelante y destacar, pero además hacer algo por la docencia….
A ”Disculpe, ¿va a compartir las diapositivas? ¿estarán disponibles los apuntes?”
-”No, porque si no, no me escucháis.”
añado “no, porque son mi propiedad intelectual” y “no, porque si no, no venís a clase”.
Yo con mis tres años de diplomatura he tenido universidad suficiente, para esto?? Ya aprenderé con libros de manera autodidacta, total, es lo mismo o incluso aprendes más.